El acoso

 Menudo tema nos ha tocado dar hoy en clase...

Y es que aún seguimos encontrando casos de acoso o bullying en las aulas. Y desgraciadamente la palabra bullying sigue estando de moda debido a la cantidad de casos que se detectan en las escuelas y en los colegios que hacen que niños que lo sufren vivan situaciones completamente aterradoras.

La palabra bullying (para los que no lo sepáis, aunque mira que me extraña) hace referencia a todas las formas de actitudes agresivas, sean del tipo que sea, que adoptan uno o más estudiantes hacia otro.

Pero es que el bullying no solamente se trata de una agresión física. No. Va mas allá, puede ser verbal, psicológico, social, realizarse a través de las redes, etc. Y a mi todo esto lo que me provoca es una atentica locura y tristeza.

Son numerosos los casos que hemos podido llegar a escuchar en las noticias sobre este tipo de agresiones que acaban con unos desenlaces fatales para las personas que lo sufren.

Por eso, como futuros educadores o para cualquier persona que me esté leyendo considero que debemos escuchar a los niños, apoyarlos en todo, no tomar la justicia por nuestra mano sino ayudarlos a que denuncien la situación frente a sus profesores, padres, tutores, etc., y si es necesario acudir al psicólogo para que los ayuden ante su mal estar, ante su ansiedad o ante cualquier otro problema que le haya podido el acoso.

Es un tema que por desgracia sigue estando muy presente en la actualidad entre los más jóvenes, y se podría evitar desde pequeños.

Con una enseñanza basada en valores, en el respeto, en la tolerancia, se puede evitar que los niños juzguen, critiquen o hagan un mal gesto a otros niños.

Porque la educación empieza desde que son muy pequeños. Y una educación así es muy importante para que los niños sean un tipo de persona u otro en el mañana.